Las epidemias de piojos son un problema frecuente, sobre todo entre los niños en edad escolar. Los piojos pasan de una persona a otra, por el contacto directo de las cabezas.
Dos niños contándose un secreto al oído, o dos familiares que se abrazan constituyen la situación ideal para que un piojo pase de una cabeza a otra.
Los piojos que aparecen en una almohada, un sombrero o el respaldo de una silla no pueden pasar a otra persona.
La idea, muy extendida, de que quien tiene piojos es por causa de una higiene deficiente es errónea, ya que existen también posibilidades de encontrar piojos en una cabeza limpia. De cualquier modo, el hacinamiento es lo que facilita el contagio.
Hoy, los piojos deben considerarse como una molestia desagradable para la que, afortunadamente, existen soluciones eficaces si se actúa correctamente.
Cada año, entre 6 y 12 millones de personas en todo el mundo se infectan con piojos en la cabeza. La mayoría de esos millones de personas son niños. Probablemente, cualquier niño que vaya a la escuela ha oído hablar de piojos porque se pueden propagar fácilmente en las escuelas.
Si un niño se infecta, puede que el resto de la clase también se infecte.
¿Qué puedes hacer? Vamos a averiguarlo.
Existen champúes y tratamientos capilares como Interflex kids, que son una solución a este problema, y son productos con una fórmula no tóxica.