Las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud señalan que a nivel mundial se estima que entre uno (1) y siete (7) de cada 1 000 niños nacidos vivos es portador de pérdida auditiva al nacer.
Panamá no escapa a esta realidad, aunque no se tienen números concretos de este fenómeno. Es por ello, que en nuestro país se efectúa el programa de Tamizaje Auditivo Universal, en el cual se establece que a partir del nacimiento y antes del mes de vida, todos los niños deben ser evaluados auditivamente, tengan o no antecedentes de riesgo.
Si se realizase tamizaje auditivo solamente a los niños con factores de riesgo, quedarían un 50% de pérdidas auditivas sin ser detectadas.
Entre las pruebas que se utilizan en los programas de tamizaje auditivo universal están las Emisiones Otoacústicas, una prueba sencilla y rápida que sin causar molestia o dolor al recién nacido, valora la buena reserva coclear. La misma se ejecuta introduciendo un pequeño adaptador en el conducto auditivo externo, que emite unos sonidos y recoge las respuestas que se generan en la cóclea del oído interno.