Los juega vivo
Recuerdo que cuando trabajaba en La Cáscara e interpretaba el papel de El Panameño, me tocó investigar a fondo cuál era la problemática. En un principio, yo lo tomaba como un relajo, como una manera de ser más ágil investigando, descubriendo y trabajando, pero me he dado cuenta de que no es una comedia, sino un mal grave que daña a una sociedad.
El juega vivo es como un sello a nivel internacional que nos caracteriza, a principio lo que yo pensaba era un mal que solo tocaba los estratos bajos de la sociedad, pero no, está en todos lados, sin importar si tienes o no dinero. Incluso, me ha tocado ver personas con autos caros y de gran renombre usando estacionamientos para discapacitados, también tomando atajos en los cines.
Me costó encontrar a un estereotipo general que identifique a un juega vivo, porque hay tantas versiones que te sorprenden, pero al final todos generan un mal igual.
Por más educación y dinero que tengas no es excusa, igualmente los que aducen que tienen pocas oportunidades tampoco lo es, lo que hacen solo es esconderse mientras siguen con lo mismo.
La cultura y la juventud es la más afectada con esto y para remediar este problema debemos empezar desde la casa, colegios, instituciones privadas, que cambien la educación de los más chicos, pues los adultos de cierta manera son caso perdido, a menos que tengan la seria intención de cambiar.
El día que todos nos demos oportunidades y dejemos de meterle el pie a alguien o aprovecharnos de una ventaja, seremos mejores personas.
La sociedad se construye desde abajo y recuerde que hay que tener buenos cimientos para que resista todo.