Todos somos vulnerables en cierto grado. Todos en el mundo buscamos aceptación, pero a veces la inseguridad y baja autoestima impide a algunos abrirse a los otros por miedo a ser heridos.
"Dorothy y el Mago de Oz" es la bella historia que se está presentando en el Teatro ABA hasta el 7 de septiembre.
Divertidos personajes como el Espantapájaros, el Hombre de hojalata y el León cobarde enseñan a Dorothy importantes lecciones de vida y aprenden de ella e interactúan en una fascinante aventura, pletórica de emoción, suspenso, momentos inolvidables y que dejan huellas en cada uno de ellos y ponen a la audiencia a reflexionar sobre aquello que realmente vale la pena en la vida.
Bajo la dirección de Félix Gómez, con la actuación de Taina Horta como Dorothy y del experimentado actor Félix Gómez como el Mago de Oz, el montaje se presenta los domingos a las 11:00 a.m. y 1:00 p.m.
También forman parte del elenco Paulo Wong (el Espantapájaros), Eduardo Herrera (es el León), David Dunn, (el Hombre de hojalata), Idania Kiki Ceville (interpreta a la Bruja mala del oeste) y Jeanny Marie Leggiere (como Glinda).
Grandes y chicos se divertirán y pasarán momentos de sana distracción con este montaje lleno de colorido, música, vistosos vestuarios, divertidas y alegres coreografías, llamativa escenografía.
La obra, cuyo libreto es de la autoría de Daniel Gómez Nates, motiva a la niñez a apostar por la familia y apreciar esos momentos felices, irrepetibles, en los que se comparte con los seres queridos en el seno hogareño, en los que la compañía y las vivencias valen más que cualquier tesoro.
Además, según nos explicó uno de los productores, Alejandro Rodríguez Tristán, esta puesta en escena de Producciones Doble AA pone de relieve la importancia de ser auténtico, de quererse y aceptarse. Eso sí, proponerse crecer, ser mejor cada vez, pero, no usar caretas ni pretender ser lo que no se es.
"La amistad verdadera y sincera, el respeto, la tolerancia y el trabajo en equipo son otros de los temas que se abordan", añade Rodríguez Tristán.
Las canciones son originales de Olanda Angarita, las coreografías de Walter Muñoz, el vestuario de Demóstenes Moreno, el maquillaje de Alexis Jaramillo y la escenografía de Arquimedes Rodríguez.
Como todas las puestas en escena de Producciones Doble AA, la obra envía mensajes que ayudan al crecimiento integral de la niñez y promueven los valores.