Mientras se busca a un nuevo director de la Caja de Seguro Social, los asegurados pasan el Niágara en bicicleta, no solo por la pésima atención, filas interminables, retraso de citas y de operaciones, sino también por la falta de medicamentos, sobre todo de pacientes con enfermedades crónicas. Muchos se las ingenian y las compran en centros de salud a un costo bastante accesible y cuando no las consiguen no les queda de otra que pagar el alto costo en farmacias. Mientras, los descuentos al salario vienen religiosamente.
El dengue azota con fuerza, siguen los problemas con el suministro de agua potable en diversas provincias y la estación seca está haciendo de las suyas en los ríos, sin embargo la mayoría está pensando en los culecos. Cada año se revive el mismo problema sin que realmente se encuentre una solución eficaz y permanente.