Alta Costura. Digno de un premio al mejor diseño de almohadas y vestidos está don Eris Carranza, quien a sus 51 años, este oriundo de Bocas del Toro, Changuinola cree fielmente en que el que persevera alcanza.
Tiene ya más de diez años de haber iniciado con mucho esfuerzo el negocio de costura, en un puesto a orillas de la calle de Changuinola, y aunque anteriormente, muchos de sus compañeros de su anterior trabajo se burlaban de él, por haber escogido un negocio en donde la mayor parte de dominio es de mujeres, él se atrevió.
¿Cómo lo hizo?
Don Eris dice que desde pequeño le ha gustado mucho diseñar, también veía a su madre coser para ganarse el sustento. Allí aprendió este arte, que ahora no es específico de ningún género; él escoge las telas, las compra y diseña hermosos vestidos de gunas, almohadas de distintos diseños, etc.
Empezó cosiendo con una pequeña máquina, en donde solo producía para el día, luego, mediante esfuerzo propio, logró comprar una industrial de mediana proporción y ubicarse en un puesto más grande, a orilla de la carretera de Changuinola.
Carranza, con cinco hijos que mantener y una esposa enferma, debe buscar el pan de cada día, mediante su propio esfuerzo, es por eso que de lunes a domingo está en su puesto desde las 8:00 a.m. hasta las 6:00 p.m., pues dice que siempre llega alguien buscando sus trabajos.
Aunque por el momento a don Eris le va muy bien, no pierde las esperanzas de tener un negocio más grande y llegar a más lugares, pues según él, sus costuras son hermosas y de buena calidad, Cada uno siembra lo que cosecha, manifestó con una gran sonrisa.