Una niña yemení de ocho años, casada con un hombre de 40 años, murió a
causa de heridas sexuales sufridas durante su noche de bodas.
La menor sufrió lesiones genitales y una hemorragia interna, informó el
diario kuwaití Al Watan.
Identificada como Rawan, la jovencita falleció en el área tribal de Hardh,
en el noroeste de Yemen.
El caso ha conmocionado a la región y la sociedad kuwaití ha llamado a
castigar al marido, que triplicaba la edad de su esposa, y a la familia de la
víctima, por permitir el casamiento.
Pese a que el país árabe promulgó una ley en febrero de 2009 que establecía
los 17 años como la edad mínima para casarse, el sector más conservador la ha
rechazado por considerarla anti-islámica.
Según un estudio de la organización World Vision, publicado en marzo, se ha
incrementado en Yemen el número de matrimonios arreglados que involucran a niñas
debido al aumento de la pobreza y la inestabilidad política.
Familias temerosas de la ruina económica y los conflictos sociopolíticos
deciden ofrecer a sus hijas a hombres adinerados como una manera de salvarlas
del complicado entorno.