Redacción web
Una mujer dominicana de 33 años, miembro de una expedición de inmigrantes ilegales a Puerto Rico y que había dado a luz, amamantó en el 2001«para calmar la ansiedad» a las siete mujeres y nueve hombres con quienes estuvo once días a la deriva; después recibió favores de su Gobierno.
Según el periódico dominicano Listín Diario, Maribel Taveras, natural de Sabana de la Mar, a 155 kilómetros al nordeste de Santo Domingo, animó a los ocupantes de la embarcación a tomar leche de sus pechos cuando habían perdido las esperanzas de ser rescatados con vida.
«No tengan vergüenza, no nos vamos a dejar morir», dijo a sus compañeros. Taveras se repone de las quemaduras solares, los problemas gastrointestinales y la deshidratación sufridas durante la travesía en el hospital de La Laguna de Nisibón, en la costa noreste dominicana.
Más de la mitad de los náufragos tuvieron que ser hospitalizados, mientras que los restantes fueron trasladados al Palacio Nacional de la Policía, en Santo Domingo, para ser interrogados.
Taveras que amamantó con sus pechos a sus compañeros náufragos en alta mar, fue favorecida por el presidente Hipólito Mejía con una vivienda, un empleo en la Administración para ella y su esposo; además 600 dólares. Ella pidió que se le mejoraran las condiciones de vida o volvería a viajar ilegalmente a Puerto Rico en busca de prosperidad.