¡Que den la cara!

Cuando pedí una idea para escribir, me sugirieron esta primero y me pareció acertada: las pensiones alimenticias.

Y lo digo así, porque conocí la historia de un señor que despertó mi curiosidad al notar que pedía su parada frente al Teatro Balboa y por nada del mundo llegaba a la Terminal de Albrook, especialmente en horas de la mañana, pues eran frecuente los operativos con el “Pele-police”.

Tras varios días de esta interrogante y conversaciones en el oeste, detecté que era por estar atrasado en el pago de la pensión alimenticia de uno o de sus múltiples hijos que se le conocen.

En vista de que estaba moroso con ellos, podía pasar pena y hasta quedar detenido en esos operativos.

Eso era todo.

Es triste saber que hay padres que le huyen a esta responsabilidad, pero más vergüenza da saber que en instituciones como el Ministerio de Desarrollo Social hay “funcionarios” con altos cargos que tampoco dan la cara por la manutención de su o sus hijos.

Deberían predicar con el ejemplo.

Aclaro que hay casos en los que el padre trata de mantenerse, busca su sustento honrado y sin embargo no le alcanza, pero más coraje da saber de aquel que gana bien, pero simplemente envía un mensaje de poco importa hasta con su propio hijo.

Ojalá y no solo acepten su responsabilidad en este país, sino también que las autoridades, llámese jueces o corregidores, le pongan el cascabel al gato y frenen esta ola de “juegavivo” contra los niños.

didier.

gil@epasa.

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