El serbio Novak Djokovic se muestra confiado en ganar esta vez en Roland Garros, el único torneo del Grand Slam que le falta, sobre todo teniendo en cuenta el nivel de forma que ha demostrado con su reciente victoria en Roma, donde venció a su gran contrincante en París, Rafael Nadal.
"Aunque Rafa es Rafa en tierra batida, no está en su mejor estado de forma", dijo ayer Djokovic en una entrevista publicada por diario francés "Le Parisien", y puntualiza que tampoco hay que subestimar al tenista español.
Sus esperanzas de vencer en esta edición de Roland Garros que se inicia hoy las fundamenta en sí mismo y en su "cambio de enfoque del torneo".
"Roland Garros siempre es un sueño, la cumbre de mis prioridades, pero el año pasado utilicé demasiada energía, hice demasiados esfuerzos para tratar de ganarlo. Comprometí mi torneo antes incluso de empezarlo a fuerza de pensar en lo que iba a hacer", reconoció el serbio.
Recuerda que en las semifinales donde se enfrentó a Nadal, ambos jugaron "un partido increíble" y que nunca había estado tan cerca de ganarle en la tierra batida de París como entonces (perdió por 9 juegos a 7 en el quinto set).