Dwight Howard cambiaría su uniforme de los Houston Rockets para usar pantaloncillos y guantes y formar parte de la UFC, siempre y cuando le paguen 10 millones de dólares.
Howard le comentó al presidente de la empresa, Dana White y a su compañero de equipo Chandler Parson su deseo.
Posteriormente White le preguntó qué necesitaría para firmar un combate en el octágono de la empresa, a lo que Howard contestó: 10 millones de dólares por tres rounds.