Desde el arranque del LXXI Torneo Nacional de Béisbol Mayor, Panamá Metro figuraba en el reducido grupo de los grandes favoritos al título, pero después de nueve jornadas los capitalinos todavía no convencen.
En sus primeros seis enfrentamientos, todos de visitantes, los capitalinos dejaron un mar de dudas y su récord negativo de victorias y derrotas de 2-4, es el principal reflejo de su inconsistencia.
Aunque colectivamente los citadinos batean para .324, un promedio que a la vista luce intimidante, esa ofensiva aún no logra ser productiva a la hora buena, ya que han dejado 55 corredores en las almohadillas.
Panamá Metro ha perdido dos juegos por diferencia de dos carreras: 5-3 ante Coclé y Herrera, y frente a Colón cayó por pizarra de 9-8, y contra Los Santos 5-4.
Defensivamente, Metro acumula 12 errores, es decir una cifra suscrita de dos pifias por juego. Los jugadores de cuadro interior Avelino Asprilla, José Camargo y Eduardo Thomas tienen dos pecados en su cuenta personal cada uno.
Por el lado de los lanzadores el clima también luce nublado, el cuerpo monticular de los metropolitanos tiene un promedio de carreras limpias permitidas de 3.51 y las ofensivas contrarias le batean para un average de .270.
De las 26 carreras aceptadas por los serpentineros de Metro, 19 de ellas son limpias, cifra que demuestra la complicidad de la defensa en varias de sus derrotas.
Orozco está tranquilo
El piloto de la escuadra capitalina, Rodrigo Orozco, declaró que aunque no puede estar contento por acumular cuatro derrotas en los primeros seis juegos, la situación tampoco es para desesperarse.
Nosotros realizamos una tremenda etapa de entrenamientos y yo confío en que mis jugadores van a despertar pronto y las cosas van a cambiar, comentó Orozco, quien adelantó que no descarta hacer algunos movimientos en el orden ofensivo, para aprovechar a los bateadores más consistentes.
Orozco aseguró que hoy su lanzador abridor será el derecho Rolando Paz.