Además de los problemas de inseguridad lo que más se comenta entre los panameños es la botadera que hay en Panamá. Empresas están cerrando sus puertas o están reduciendo su planilla dejando en la calle a muchos panameños. Como si fuera poco, a esta incertidumbre que se siente en las calles se le suma el anuncio del aumento de la tarifa de energía eléctrica. Al paso que vamos, la gente vivirá encerrada, comerá arroz pelao y se alumbrará con guaricha, porque este gobierno no da descanso a los problemas.
Eso pasa con el que se esfuerza por trabajar, porque a los que no trabajan el gobierno los premia con casas prácticamente gratis, les da subsidios y los tiene contentos. ¿Qué tipo de mensaje estamos enviando con este paternalismo exacerbado? Que hay oportunidad para los que viven de la politiquería barata.