Araúz manifestó a este medio que, debido a que su madre se sentía mal y no la atendían, se acercó al consultorio de una doctora apellido Hernández para que atendiera a su mamá. Al entrar le comuniqué que por favor atendiera a mi mamá y fue cuando la doctora me respondió que quién era yo para mandarla a atender a los pacientes, dijo Araúz.
Este medio consultó a Javier Díaz, director nacional de Prestaciones Médicas de la Caja de Seguro Social, quien explicó que en este tipo de situaciones los pacientes deben poner la queja en la dirección de Asuntos del Usuario con nombre del doctor, día, y la sala en la que se encontraba. Luego se abre una investigación y si resulta positiva se le da una amonestación verbal, escrita y si ocurre una tercera vez suspensión de dos días y si sigue se le saca del sistema.