A pesar de que son odiados por muchos panameños, estos vehículos marcaron un hito en el país y fueron tan famosos que los turistas morían por tomarles fotos, por sus pintorescos diseños.
En su momento, buses como: Mamá Inés, Sir Robert, Fantomas de Veranillo, Gran Barú, Elisa Del Carmen, Cielo Xochil, de Torrijos Carter, eran los más esperados por los pasajeros, especialmente los más jóvenes. Otros buses que destacaron fueron: My Name is Panamá, de Pacora; Niña Tania, de Concepción, y muchos más que impusieron la moda con sus copas y mofles cromados, flecos, luces de neón y la música.
El próximo 28 de diciembre, el último "diablo rojo" dejará de rodar por las calles de la ciudad capital, dejando historias de amor, desorden, pero también mucho luto y dolor.