A falta de una semana para que se cumpla el primer aniversario del incendio de la discoteca brasileña Kiss, en la que perdieron la vida 242 jóvenes, familiares, amigos y sobrevivientes de la tragedia participaron ayer en el municipio de Santa María (Río Grande do Sul) en una marcha en la que se recordó a las víctimas.
Desde las 8 de la mañana hora local y portando carteles en los que se pedía justicia, un grupo de personas realizó una caminata por las calles de Santa María, donde el 27 de enero de 2013 se registró uno de los peores incendios del país.