En Panamá, el 60% de los productores superan los 45 años de edad, lo que según Blanca Gómez, experta en temas agro, pone en peligro la seguridad alimentaria del país, ya que no existe un relevo generacional.
Eso no es todo, pues según la experta, preocupa que en unos años, los panameños dependerán de la importación, y con eso se estarán consumiendo alimentos que tendrán un origen desconocido.