Bien dicha la frase de que una imagen vale más que mil palabras o, en este caso, un emoticón, que se ha apoderado del comercio panameño.
Y es que ahora no hay quien se resista a tener uno en el auto, en su cama y hasta colgado en su pecho, pues hasta accesorios hay con estos dibujos.
Según Irma Díaz, vendedora en un local comercial, lo que más salida tiene son las almohadas, pues niños y grandes las quieren tener, siendo las de felicidad y las de enamorados las más buscadas.