La soledad no es una buena amiga para los humanos, menos para los animales, que necesitan una buena compañía para seguir el curso de su vida.
Tal es caso de Panamá, un águila que tiene toda una historia y aquí te la contamos. Es una bella ejemplar de águila harpía Harpia harpyja, que nació en el 2009 en el zoológico de Miami, Estados Unidos, donde la bautizaron como Panamá. Ella llegó al país con la idea de que fuera reproducida para fortalecer la población de su especie, en peligro de extinción por la cacería y la deforestación.