El papa Francisco y la Santa Sede condenaron hoy "la manifestación de locura homicida y de odio insensato" de la matanza en una discoteca gay de Orlando (EEUU), en la que murieron al menos 50 personas y 53 resultaron heridas.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, señaló en un mensaje que "el terrible crimen sucedido en Orlando, con un número altísimo de victimas inocentes ha suscitado en el papa Francisco y en todos nosotros los sentimientos más profundos de condena, de dolor y de perturbación, ante esta nueva manifestación de locura homicida y de odio insensato".





