En el frente de la lucha contra una epidemia de abuso de drogas en Estados Unidos se han visto reacciones emotivas y a veces contradictorias a la noticia de que Prince pudo haber muerto por una sobredosis.
Los involucrados en la lucha dicen que el deceso de una celebridad puede ayudar a despertar conciencia sobre el problema, aunque también opaca a las otras cientos de víctimas que mueren cada semana. Otros sugieren que la atención a las muertes de famosos es transitoria y tiene un impacto limitado.