Cuasimodo ha tenido una vida miserable. Así lo han hecho sentir siempre muchos de los que lo rodean, quienes se muestran insensibles, carentes de amor hacia el prójimo y abusan de él, se burlan cruelmente y tienen otras conductas con las que le demuestran que no es aceptado, no es bienvenido, que no lo quieren.
Lo que es peor, lo han privado de su libertad, un derecho fundamental.
En estos tiempos, esos malvados, ese par de insensibles (el Juez Frolo y el Capitán Febo) podrían haber sido acusados de "bullying".





