En siete días, el teatro Anita Villalaz, ubicado en el Casco Antiguo, será testigo de un hecho sin precedentes.
Once jóvenes con discapacidad, que no saben leer ni escribir, entrarán en escena con la obra "La princesa Zukimuki", de la poetisa argentina María Elena Walsh.
Han transcurrido cinco meses de preparación y curiosamente, los chicos con síndrome de Down, asperger, autismo o algún nivel de retardo mental son los primeros que se han aprendido el guion, antes que los otros seis sin discapacidad.





