El veterano Richard Miranda vivió el ascenso a la máxima categoría del Chiriquí, pero también la debacle en 2012, cuando el conjunto del Valle de la Luna perdió la categoría y bajó a la LNA.
A sus 35 años, piensa que todavía tiene fútbol en sus piernas para batallar y ayudar al Atlético Chiriquí a regresar a la Liga Panameña de Fútbol (LPF).





