Roma/EFE. El Milan fue sancionado a disputar un partido de Liga a puerta cerrada y al pago de una multa de 67,000 dólares por los insultos que algunos de sus aficionados profirieron el pasado domingo durante el encuentro contra el Juventus.
El juez deportivo, Giampaolo Tosel, dictó esta sanción al considerar que centenares de hinchas del Milan, pocos minutos antes del inicio del partido y en los minutos 6 y 46 del segundo tiempo, entonaron un insultante coro que expresaba discriminación territorial contra los seguidores del equipo contrario.





