Un atleta que inspira mucha confianza. El dominicano Félix Sánchez, doble campeón olímpico y mundial de 400 metros vallas, convocó ayer a los deportistas latinoamericanos a "seguir luchando para demostrar que sí podemos", después de ganar su serie en los Mundiales de Moscú.

"No solo los dominicanos, sino todos los latinoamericanos vamos a hacer lo más posible para demostrar que sí podemos", dijo tras la carrera, utilizando el lema publicitario de Barak Obama ("Yes we can").

El entrenador de Manny Pacquiao, Freddie Roach, manifestó ayer, en una entrevista para Yahoo Sports, que el preparador físico Álex Ariza ya no forma parte del equipo del boxeador filipino.

La salida de Ariza se dio luego de que la relación de él y Roach se deteriorara.

Este cambio se produjo a tan solo tres meses y medio del combate entre Pacquiao y el estadounidense Brandon Ríos, el 23 de noviembre en China.

La selección de fútbol sub-15 de Panamá derrotó ayer a su similar de Brasil en la tercera fecha de la Copa México de Naciones, torneo de preparación que se disputa en tierras aztecas.

El conjunto canalero, que dirige Juan Carlos Cubilla, venía de caer en sus dos primeros compromisos ante Uruguay (6-1) y luego ante Estados Unidos (4-0); por lo tanto, y pese al triunfo, los nacionales quedaron eliminados de la justa.

El atacante Chamell Asprilla fue el héroe de la jornada al anotar el gol del triunfo para el onceno panameño.

El internacional mexicano Christian “Chaco” Giménez, nacido en Argentina, dijo ayer que desea estar mucho tiempo con el equipo de su país adoptivo que lo convocó por primera vez para jugar un amistoso con Costa de Marfil, mañana.

"Quiero quedarme mucho tiempo en la selección. Si llegué, la quiero aprovechar al máximo", declaró Giménez en su primera concentración al mando del entrenador José Manuel de la Torre, que le llegó un mes después de obtener su carta de ciudadanía.

Ya es hora de que el panameño Roberto “La Araña” Vásquez se siente a analizar qué hará con su carrera profesional.

La jamaiquina Shelly-Ann Fraser-Pryce, una pequeña bomba de 1.52 metros de estatura, hija de una velocista, volvió a erigirse ayer en reina del “sprint”, al ganar la final de los Mundiales en 10.71 segundos, la mejor marca mundial del año.

No importó que saliera algo lenta (174 milésimas). Su espectacular puesta en acción, con pasitos cortos y potentes, la puso en cabeza rápidamente y fue alejándose cada vez más hasta cruzar la raya 22 centésimas antes que la marfileña Murielle Ahoure.

Una competencia que no le ha sonreído al panameño. El pedalista chiricano Yelko Gómez completó ayer la quinta etapa de la 75.ª Vuelta a Portugal, en la posición 111 (4:39:33) a 18 minutos y 46 segundos del ganador, el español Manuel Cardoso (4:20:47).

Luego de su actuación, Gómez, al servicio del equipo español Caja Rural-Seguros RGA, se posiciona 120 de la clasificación general a 1:02:22 del líder, el español Sergio Padilla (24:46:40).

Un evento benéfico, divertido y lleno de mucho color.

El corredor istmeño Jorge Castelblanco, con tiempo de 33:22, conquistó los 10 kilómetros de la carrera BAC Pro Niñez, realizada el pasado domingo en la Cinta Costera.

El experimentado corredor Fernando Blanco (33:30) y Javier Solís (34:10) en la tercera posición, completaron el podio.

Por otra parte, la atleta Alicia Zorrilla, con un tiempo de 41:04, se consagró en la rama femenina. Seguida por Yeimi Castillo (43:17) e Iris Camarena (45:04).

Hazte a un lado Carl Lewis. Tú también, Michael Johnson.

Para cuando termine el Campeonato Mundial de Moscú, Usain Bolt podría haberse sumado a esa compañía ilustre en el selecto club de los atletas que han ganado ocho medallas de oro en esta justa.

El resultado y la manera de desarrollar su combate, el pasado sábado en el Megápolis Convention Center, no fue del agrado del pugilista Azael “Turbo” Cosio.

Por ello el panameño manifestó que está dispuesto a enfrentar otra vez al colombiano Devis Cáceres. Cosio cayó ante este boxeador por decisión mayoritaria.

“Turbo” confesó ayer que aunque su anatomía lucía en buen estado, él se sentía débil, lo cual le sorprendió, pues su cuerpo nunca lo había traicionado.