La colombiana Caterine Ibargüen, que consiguió ayer el mayor logro de su carrera deportiva tras proclamarse campeona de triple salto en los Mundiales de Atletismo de Moscú, salió de las pistas del estadio Luzhniki a sabiendas de que había hecho historia en su país.
"Sé que se hace historia para mi país. Sé que (la medalla de oro) va a ser la primera de muchas porque esta es la prueba de que sí se puede", dijo la flamante campeona a los periodistas.





