Los moradores de las comunidades de Guabito, La Mesa, Las Tablas y las fincas 51 y 52 en Bocas del Toro, oran todos los días para que no se dé un incendio, pues el carro bomba se dañó hace dos meses y hasta el momento no lo han reparado ni mucho menos llevado uno nuevo.
Se trata de unas 5 mil personas que residen en estos lugares y, aunque parezca chistoso, varios han dicho que de darse un fuego los bomberos tendrían que correr a apagarlo con cubos porque no hay de otra.
Situación se agrava