Labor ardua. Así es la vida de Antonio Arreaga, un hombre humilde que pese a su edad sigue luchando para seguir adelante y enorgullecer a los suyos.

Tres movimientos sísmicos registrados la mañana de ayer, en la provincia de Chiriquí, han causado alarma en la población.

El primero fue de magnitud 4.7 en la escala de Richter y se registró a eso de las 10:32 a.m., mientras que un segundo sismo de 4.9 se dio a las 10:37 a.m.; ambos con epicentros al noroeste y este de Puerto Armuelles, con profundidades de 10 y 20 kilómetros.

Dos años reciclando. Vidrios, papel, plástico, lata, cartón, entre otros, fueron algunos de los materiales llevados ayer a los terrenos del edificio de la Administración del Canal de Panamá, donde se celebró el segundo aniversario de la Feria “Yo reciclo”.

Además, los visitantes podían donar sangre para apoyar a Fundacáncer y al Instituto Oncológico Nacional.

Males que no terminan. Cuando es hora de comer, los moradores de la comunidad de Chilibrillo, en el corregimiento de Chilibre, deben tener a mano un matamoscas y por las noches fumigar sus habitaciones con pesticidas para evitar que los mosquitos los piquen, manifestó molesta Mirna Pérez, quien tiene 20 años de residir en el lugar.

Maniobra le salvó la vida. Un “pick-up” de una empresa privada quedó prácticamente debajo de un bus cuando colisionaron frente a la entrada de Burunga, en Arraiján.

El “pick-up” era conducido por Milena Leone, quien realizó una maniobra defensiva cuando el conductor del bus se atravesó en los cuatro paños de la vía.

Confundidos. Los usuarios del metrobús no están seguros de si cuando se inicie la temporada lluviosa, las casetas recién instaladas en la parada de la 5 de Mayo serán lo suficientemente espaciosas para protegerlos.

Ricardo Jaramillo, un cliente de la empresa Mi Bus, operadora del metrobús, siempre aborda su bus en la parada de la 5 de Mayo por eso considera que a la hora de un fuerte aguacero, todos quedarán apiñados al quererse cubrir del aguacero.

Es para panameños. Juan Jiménez, presidente de la Asociación de Buhoneros de Panamá, explicó que todo negocio que está en la servidumbre pública o aceras municipales es considerado como parte del sector informal.

En ese sentido, y de acuerdo con el Decreto Alcaldicio 25 del 14 de enero de 1999 que rige en los 21 corregimientos del Municipio de Panamá, está reservado para los panameños.

Según Jiménez, aquí nadie respeta la ley porque no se hace cumplir, pues hay muchos extranjeros ejerciendo la economía informal.

El personal médico recomienda que las personas observen si el vendedor cuenta con agua potable y jabón, miren el estado de su cocina, utensilios o herramientas de trabajo y que los platos, vasos y cubiertos sean desechables.

Todo puesto de comida que no cumpla con estos parámetros se clausura y se le decomisan los alimentos que en su momento tenga. Las sanciones por este tipo de problemas oscilan entre los $500.00 y los $5,000.