Luego de tres derrotas consecutivas, el Chorrillo volvió a la vida en sus dos siguientes encuentros, en los que sumó puntos, todo gracias al cambio de mando en el timón.
Partió el argentino Javier Ainstein y se le dio la oportunidad al panameño Luis Maughn, un técnico de la casa, quien retomó el manual dejado por el uruguayo Miguel Ángel Mansilla para tratar de sacar a flote al conjunto amarillo.
La clave de todo ha sido volver a lo nuestro, a las bases, contó Maughn, quien por primera vez asume las riendas de un equipo de la Liga Panameña de Fútbol (LPF).





