No cabe la menor duda de que los buses o diablos rojos como son conocidos en el país, son un medio de transporte bastante pintoresco y en los que uno puede ver y encontrar lo que menos se imagina.
El pasado martes, abordé uno de la ruta Panamá Viejo, frente al Mercado San Felipe Nery, al pisar el primer escalón, noté lo estridente de la música, un reggae de esos de mi tiempo cuando era pelao.





