No hay ningún obstáculo que el amor no pueda vencer. El de la madre por sus hijos y el de estos por su madre. Eso es lo que ha mantenido en pie a la Sra. María a lo largo de sus padecimientos y lo que ha unido cada día más a su familia.
Ella ha estado luchando con su salud desde 1969, cuando nació su hijo menor y le tuvieron que practicar su primera intervención quirúrgica, una cesárea. Luego, en 1975, fue operada del hígado y le extraen la vesícula. En 1980, fue operada de bocio y en los 90s le detectan arritmia cardiaca.