Hay que reducir la ingesta de azúcar entre los adolescentes para evitar que se conviertan en adultos con diabetes o enfermedad cardiaca. Esta es una prioridad nutricional.
Alimentos peligrosos
Azúcares blancos: provocan excesiva hiperactividad y nerviosismo.
Grasas saturadas: estas grasas y los ácidos grasos "trans" son responsables de muchas alteraciones en la salud vascular cerebral (derrame).
Alcohol: produce un grave deterioro del sistema nervioso, pérdida de concentración e inestabilidad emocional.