Cada persona tiene una manera peculiar de festejar el inicio del año. Algunos prefieren repetir los rituales que sus padres desde jóvenes les han enseñado, como vestir una prenda amarilla, ir a misa o comerse las 12 uvas.
Antes de las doce campanadas y entrando el nuevo año, varias caras del espectáculo panameño dedicaron unos minutos de su tiempo para realizar algunos rituales con el único propósito de llenar sus vidas de cosas positivas.