Esto es bien simple. Ninguna de las coberturas de las televisoras locales, ni aquí ni en Brasil por los juegos olímpicos sirvió. Punto.
Los juegos olímpicos nos revelaron y dejó al descubierto lo poco creativos que fueron las tres televisoras comerciales del país.
Y es que seamos honestos. Una cosa es que podamos comprender que no se contaba con los derechos de transmisión y otra, muy diferente, que no hayan podido ser creativos para crear espacios especiales pre y post participación de nuestros atletas y/o resúmenes diarios de lo que sucedía en Brasil.