Cuba está lista para recibir hoy a Barack Obama, el presidente de Estados Unidos que apostó por la reconciliación de dos países enfrentados por más de cinco décadas y que quiere hacer irreversible el proceso de deshielo diplomático con esa histórica visita.
Obama será el primer presidente estadounidense en activo que pisará Cuba desde 1928, cuando el republicano Calvin Coolidge asistió en La Habana a una cumbre regional, y el único que hasta ahora lo ha hecho desde el triunfo de la revolución castrista en 1959, fecha que abrió el largo diferendo entre La Habana y Washington.