México demostró que por algo es el campeón: Con un doblete de Iván Ochoa y otro tanto de Marco Granados, despachó ayer 3-0 a Argentina y se clasificó a la final del Mundial Sub-17 de Fútbol, en el que buscará su tercera corona.
Para la selección de Argentina, esta derrota la deja otra vez sin poder siquiera acceder a una final de este torneo, el único a nivel mundial que los Albicelestes jamás ganaron.
México disputará el título el viernes con Nigeria, tras derrotar con facilidad a Suecia.