Con nostalgia, los moradores de la comunidad La Aldea, ubicada en Pedregal, aún recuerdan cuando podían ir al río El Naranjal a coger camarones y las calles estaban en buen estado.
Ahora lamentan que la comunidad esté llena de aguas negras y las calles estén intransitables por la gran cantidad de huecos.
Los quejosos expresaron que todo se comenzó a dañar en la comunidad cuando empezaron a construir unas barriadas. También mostraron su preocupación por un lote baldío que tiene un enorme herbazal.