Madrid/EFE. Sergio Ramos, segundo capitán del Real Madrid, dio todo su apoyo ayer a Karim Benzema, reprendió el comportamiento de su compañero en defensa Pepe por la bronca que tuvo en el derbi con el delantero francés y le guió a apoyar a un jugador que, admitió, lo está pasando mal.
Pepe pidió perdón ayer a Benzema por el comportamiento que tuvo en el derbi madrileño. En un saque de esquina, el portugués reprendió a su compañero y le pidió más entrega.