Un hombre de Nueva Jersey que estuvo preso por homicidio durante casi 20 años logró revertir su condena el lunes, con evidencia de ADN que demostraba que un mordisco en el cuerpo de la víctima era de otro individuo.
Gerard Richardson será puesto bajo libertad condicional en unos días tras pagar una fianza de 5.000 dólares. El hombre apeló su condena por el homicidio de Mónica Reyes, de 19 años, cuyo cadáver fue hallado en una zanja en Bernards Township, un pueblo del norte de Nueva Jersey en febrero de 1994.





