El drama de Norrmalmstorg, el atraco a un banco con toma de rehenes en el centro de la capital sueca que dio origen al conocido síndrome de Estocolmo, cumple hoy 40 años.
Un atracador, un presidiario y cuatro empleados convivieron seis días en la bóveda de seguridad de un banco, y los rehenes entablaron una relación de complicidad con sus secuestradores que acabó dando nombre a un término psicológico de uso común en todo el mundo.