El derrame de combustible de un camión articulado tipo mula que se dio ayer a raíz de un vuelco en Natá, Coclé, ocasionó un descomunal tranque que obligó a las unidades del tránsito que atendían el caso, a hacer un desvío de los autos por Capellanía.
El cisterna marca Internacional, color blanco, estaba lleno de combustible y era conducido por Eliécer Pérez, de 40 años, quien afortunadamente no sufrió golpes que pusieran en peligro su vida.
Pérez perdió el control del pesado vehículo y fue a parar en medio de las cuatro vías, donde el combustible se derramó.