Pasan calamidades. Que el agua salga del grifo es como un sueño para los moradores de las comunidades de Alto Lindo, El Pedernal, La Fe, La Unión y San Vicente, en el corregimiento de Chilibre.
Gustavo Luna, de 47 años, ha residido toda su vida en Alto Lindo y recuerda que antes, por lo menos en sus plumas veían llegar el líquido dos veces por semana, ahora si acaso una vez al mes. Él es uno de los tantos afectados por la escasez del agua y dice que no entiende por qué deben vivir como el gorgojo, teniendo la planta potabilizadora de Chilibre tan cerca de ellos.





