Cuidado. Si tiene mascota debe procurar mantenerla lejos de los ruidos excesivos, pues las pone nerviosa y afecta sus oídos.
La música excesiva, el fuegos pirotécnicos y otros pueden alarmar a los animales que están en sus hogares.
El veterinario Carlos Moreno explica que la sensibilidad de los animales se debe a que ellos tienen un sentido de la audición mucho más sensible y desarrollado que los humanos, por ende, los ruidos muy fuertes y demás tienden a ser más que molestos para ellos.