Moza, quiero que me ayudes; mi problema no es de amor, pero ansío que me puedas guiar, ya que me siento muy mal por algo que me pasó en el trabajo.
Lo que sucede es que tengo una compañera que siempre que digo algo, ella está pendiente porque parece que le gusta hacerme la vida imposible.
Te digo esto porque veo que siempre resalta mis errores y porque nada de lo que hago le parece bien. ¿Sabes qué es lo peor Moza? Que ella no es ni mi jefa y se pasa la vida molestando.