Le gusta lo que hace. Yessica Gutiérrez no le teme a nada, desde pequeña, ella ha sido una luchadora, y ya hace ya siete años que emprendió su negocio de batidos y emparedados y le va muy bien.
Ella dice muy contenta que con mucho esfuerzo empezó este negocio porque, aunque siempre quiso dedicarse al negocio de restaurantes, en su momento no contaba con la ayuda necesaria y no podía quedarse parada.
Ella tiene dos hijos en edad escolar, por lo que tiene que luchar diariamente para conseguir dinero.