Se trata de Elvis Vladimir Vergara, de 47 años de edad, quien viajaba en una camioneta Hyundai, mientras que el más afectado fue Heriberto Geovany González, de 39 años, quien se desplazaba en una moto BMW.

Socorristas del Cuerpo de Bomberos de Guararé realizaron el rescate e hicieron el traslado hacia el hospital Nelson Collado de Chitré. El accidente ocurrió a las diez de la mañana.

Maris mira su foto y aún recuerda el día que su hijo nació y de cómo se convirtió poco a poco en un hombrecito, pues de los pequeños “camarones” que realizaba lavando chivas siempre le daba algo para los gastos de la casa. “Él era muy atento”, expresó con tristeza.

No tomar aspirina, lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón, mantener los ambientes limpios y ventilados.

Si usted viajó a lugares que tienen el virus, podría presentar síntomas en 10 días.

Campañas de lavados de manos

De los 330 casos reportados al 18 de junio de ese año, 174 eran varones y 156 eran mujeres. Por edad, 208 casos eran de menores de 15 años; 44 casos, entre 15 y 19 años; 70 eran entre los 20 y 49 años; y ocho casos, mayores de 49 años.

Por ubicación, 297 casos se atendieron en la provincia de Panamá (225 en el distrito de Panamá, 58 en el distrito de San Miguelito, 14 en el distrito de Arraiján); 28, en la provincia de Colón.

Pasados tres días decidió ir a la Caja del Seguro Social de La Chorrera, en donde el doctor le recetó medicamentos cotidianos que no le hacían efecto, mientras que su cuerpo se desgastaba.

La gripe entró a Panamá el 8 de mayo del 2009, cuando un turista llegó al país en un vuelo proveniente de Estados Unidos y fue distribuyendo la enfermedad por sus alrededores, a tal punto que ese mismo año se reportaron más de 11 muertes.

Tal como si estuviera en la playa, un orate disfruta de los rayos del sol a orilla de la vía principal de la 24 de Diciembre. A pesar de que no le hace daño a nadie, los peatones aducen que el olor que emana de este es insoportable. (Foto: HERMES GONZÁLEZ)

Un monje andariego se encontró, en uno de sus viajes, una piedra preciosa, y la guardó en una bolsa.

Un día se encontró con un viajero y, al abrir su bolsa para compartir con él sus provisiones, el viajero vio la joya y se la pidió. El monje se la dio sin más.

El viajero le dio las gracias y marchó lleno de gozo con aquel regalo inesperado de la piedra preciosa que bastaría para darle riqueza y seguridad todo el resto de sus días.

Sin embargo, pocos días después volvió en busca del monje mendicante, lo encontró, le devolvió la joya y le suplicó:

“Ganamos justicia más rápidamente si hacemos justicia a la parte contraria”.

Mahatma Gandhi

Carta al hijo de una madre cualquiera:

Querido hijo: Soy la peor madre del mundo, la menos sublime, la menos comprensiva, la menos abnegada y la menos sacrificada.

Jamás se me ha pasado por la mente darte algo sin recibir nada a cambio.

Siempre te he guiado para que seas un buen ser humano, feliz, que hagas siempre lo correcto, que jamás les hagas daño a los demás, que ames a tu prójimo, que estudies, que seas hoy un hijo obediente y bueno, y mañana un hombre a carta cabal y un excelente profesional y, sobre todas las cosas, que tengas siempre a Dios en tu corazón.