Los quieren sacar del lugar. Molestos estaban los transportistas de Veranillo, luego que se les diera a conocer que serán desalojados de la piquera que opera en el lugar por más de 20 años.

El transportista Tomasito López destacó que de parte de la Gobernación les enviaron una notificación del desalojo, pero si se pone en función la medida serán 30 mil los usuarios afectados, ya que existen 320 buses que brindan el servicio.

Inconformes. Gremios de educadores hacen evaluaciones de la aplicación del nuevo proceso de vacantes en línea, Provel, ya que sienten que no hay ningún beneficio.

Yadira Pino, secretaria general de la Asociación de Educadores Veragüenses (AEVE) manifestó que se está evaluando los resultados del proyecto del Ministerio de Educación de vacante en línea, pues es un método no adecuado, ya que hasta el momento hay una sola persona contratada y reciben múltiples quejas de compañeros que aducen que el sistema los rechaza, sacándolos del proyecto sin siquiera haberlo intentado.

Se agudiza el problema. La falta de diésel exonerado para el transporte del sector este se convierte en un dolor de cabeza para los conductores del área, porque no les alcanza el dinero para subsistir.

La presidenta de los buses de Las Garzas-La Doña, Idayra De León, manifestó que las cuotas del subsidio para el diésel son pocas y no rinde para las 50 unidades que salen hacia la capital, por lo que en ocasiones, los conductores dejan de laborar de cuatro a cinco días, pues existe una sola estación que les ofrece el combustible.

Medida de presión.

No aguantan más. Múltiples llamadas a la Policía Nacional hacen los residentes de Veracruz para denunciar el alto índice de violencia, esto motivó a que el miércoles unidades de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ) se tomara el lugar para así desarticular una pandilla que abarca casi la mayoría de los sectores (Coskuna, Altos de la Roca, Costa del Sol, Calle Capitán Rivas, Calle Primera y Los Pinos) y que es liderada por dos mujeres que se dedican a la venta de sustancias ilícitas.

¿Cómo empezó?

Está grave. La noche del miércoles, Irving Torres Lasso, de 23 años, fue ultimado por tres delincuentes (dos menores), con un tiro en la cabeza cuando estaba en su casa en Nueva Libia, pero estos fueron detenidos.

Mientras, ayer el activista Jorge Brok, de 40 años, recibió un tiro en una pierna cuando estaba en el centro político de un diputado en Paraíso, San Miguelito.

Suciedad. Ayer, desde muy temprano, arrendatarios y productores del Mercado de Abastos cerraron el acceso al lugar, impidiendo el paso a las personas que iban a adquirir sus productos y a los productores que iban a dejar mercancía.

Los manifestantes denunciaron que la insalubridad en el lugar ya se ha hecho insoportable, además hay falta de seguridad por las noches y por si fuera poco, les han aumentado en un 33% la tasa de arrendamiento y se les ha multado con $500.00 a aquellos que no declararon renta.

En 1.6% han disminuido los niveles de infestación por el mosquito Aedes aegypti.

Según Jorge Hassán, director de la Región Metropolitana de Salud, es bueno que la ciudadanía siga tomando conciencia en cuanto a erradicar los criaderos, porque de nada sirve que se sigan haciendo jornadas de fumigación, si las personas no cooperan. Destacó que sectores como Las Mañanitas y Betania registraron gran cantidad de casos de dengue el año pasado.

Ayer continuó la búsqueda de la norteamericana Ivonne Lee Bandelli, de 42 años, desaparecida desde noviembre del año pasado en Isla Carenero, provincia de Bocas del Toro.

Buceadores del FBI se sumaron a la búsqueda, junto a agentes de la DIJ e INTERPOL. Por tierra, entregaron volantes con la foto de Ivonne, casa por casa.

Brian Brimager, de 41 años, novio de la mujer, regresó a Estados Unidos, donde es investigado.

Hicieron honor a su lema de “Proteger y Servir”. Admiradas quedaron las personas que estaban la noche del miércoles en los predios de la sala de urgencias del hospital Santo Tomás, cuando dos mujeres de la Policía Nacional ayudaron a bajar de un patrulla del municipio a Gil Rolando Córdoba, de 53 años, quien mantenía el puñal incrustado en el cuello.

Las mujeres, sin el mínimo asco, porque el hombre estaba ensangrentado, lo cargaron bajándolo del vagón del patrulla hasta que se pusiera de pie y poco a poco lo llevaron hasta una camilla.