Yanelis Domínguez Cumpliendo con su deber. Con tan solo cinco meses de estar laborando como miembro de la Policía Nacional, Anel Eduardo Cano, de 21 años, falleció ayer al resbalar del vagón del patrulla en que viajaba.
Cano, quien iba vigilando a unos detenidos que iban dentro del vagón con rumbo a Felipillo, recibió un golpe mortal en la cabeza al caer en el pavimento.
Sus compañeros aseguraron que era una persona muy madura, amigable y que se esforzaba por cumplir su misión.