De Donald Trump es más usual esperar palabras polémicas que elogios. Sin embargo, ayer el mandatario estadounidense se rindió ante la figura del exlanzador panameño Mariano Rivera.
El chorrerano asitió a una junta en la Casa Blanca con el presidente de Estados Unidos y con otros funcionarios de alto perfil, entre los que también estaba Jared Kushner, esposo de su hija Ivanka Trump.
Rivera no había terminado de hacer su presentación como promotor de la fundación que lleva su nombre, cuando Trump mostró su simpatía por él.





